Desde hace un tiempo tengo un problema que me atormenta. Mi hija de dos años muerde. Yo sé que no lo hace con maldad (ningún niño es malo) pero lo hace cuando algo le molesta y inevitablemente lastima a otros. Este tema ya está a punto de costarme la amistad con nuestros mejores amigos porque mi hija le ha mordido varías veces a la suya. Es horrible ser la mamá de la que muerde, porque te sientes doblemente mal, mal porque otro bebe salga lastimado y mal porque no entiendes porque tu hija sigue mordiendo por más de que le hayas explicado mil veces que eso NO se hace!

Los bebes alrededor de los dos años muchas veces muerden como una manera de canalizar sentimientos de frustración, enojo, miedo o emoción. Es normal de la edad, ya que todavía no hablan del todo, están aprendiendo a lidiar con sus sentimientos y el primer impulso que les sale es físico (empujar, morder, pegar o gritar).  El hecho de que sea algo normal de la edad no quita que es horrible que a tu hijo lo muerdan y vuelva del nido con marcas de dientes, o ser la mamá de la que mordió. La pobre criatura termina siendo catalogada como una loca o agresiva que todos prefieren evitar, olvidándose que estamos hablando de una niña pequeñita que aún está aprendiendo a interactuar en este mundo con otros y consigo misma.

En el parque un par de niñas han sido víctimas de las mordidas de Olivia, y las nanas no perdieron tiempo en pasarse la voz. Así que si nos ven llegar miran para otro lado o incluso se mueven de lugar, y si llegan más tarde y nos ven allí tratan de irse lo más lejos posible de nosotras. Yo me doy cuenta y es un sentimiento horrible, pero por suerte Oli es chiquita y ni se inmuta. Igual al principio me parecían unas ratas apestosas, pero la verdad que la mayoría que hace eso son nanas y también entiendo que prefieren cubrirse. Las mordidas dejan marcas horribles y después las mamás les terminan echando la culpa a ellas de que no cuidan bien a sus hijos. No debemos olvidar que hay cosas normales de la edad que pasan en un pestañear y que son reacciones que uno no siempre se las espera.

He estado leyendo un montón del tema para ver la mejor forma de manejarlo y tratar de entender más sobre el por qué lo hace. Joaquín mordía pero era más de emoción que de enojo. En cambio Olivia  muerde porque algo le molesta, le da rabia y muerde.  Pueden leer aquí el post de como corregí las mordidas con Joaquin y estoy intentando aplicar lo mismo con Olivia, el tema es que ella es más intensa y pasional y por ende se me está haciendo más difícil corregirla.

Les dejo algunos tips sobre como debemos manejar las mordidas y el pegar con los niños pequeños por si alguna anda tan desesperada como yo con este tema.

  • Entender porque mordió para tratar de evitarlo y poder anticiparse a las situaciones que motivan a que quiera morder.
  • Cuando pasa el incidente primero fijarse en el bebe herido y una vez que eso esté bajo control hablar con el bebe que mordió. Mostrarle la herida y que el otro bebe llora porque le duele, sirve para que se de cuenta de las consecuencias de sus actos. Allí le das la oportunidad de identificar sentimientos y además de poder hacer algo para redimirse, como darle un abrazo o disculparse para así sentirse menos culpable.
  • Motiva a tu hijo a que recurra a ti o que le pida ayuda a un adulto si algo le molesta.
  • Si te das cuenta que muchas veces muerde por impulso y que son incontrolables esas ganas que tiene mejor es darle una alternativa, por ejemplo un cojín o un trapito para que muerda.
  • Una vez que se haya calmado es importante hablar de lo sucedido.
  • Siempre comunícate con amor y paciencia. Por más de que en el momento que muerde es lo último que te nace. Tratarlos con amor va a hacer que se sientan más seguros y en confianza para identificar sus emociones y decirnos lo que les está molestando.

La próxima vez que su hijo muerda o lo muerdan tengan en cuenta estos puntos. No se olviden que todos los niños son un mundo y son muy distintos. Algunos son más dóciles, otros más intensos, algunos duermen otros no.  Es fácil criticar a la madre y acusar al pequeño. Pero no sean tan duros ni con el niño ni con sus padres, son cosas que pasan y que se deben corregir mientras son pequeños y aún estamos a tiempo, busquemos soluciones no culpables.

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Escrito por kiki

    1 comentario

  1. Sandra Alvarez 9 marzo 2017 at 10:30 Responder

    Tan bella!! Mirada picara e inocente. Si pues cada niño es un mundo y debemos ponernos en ambas posiciones. Esta creciendo y esta aprendiendo como comunicarse y comportarse con el resto.

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