Muchas veces los niños pequeños no cuentan nada , por más de que les preguntes por cosas específicas y no tan amplías igual la respuesta es de una sola palabra. Yo creía que era porque se olvidaban o porque simplemente no querían contar. Pero me he dado cuenta que somos seres de costumbre, hacemos lo que aprendemos y lo que se nos acostumbra a hacer.
Hace un tiempo empecé a aplicar una técnica con Joaquin que me está funcionado y por eso se las comparto. En lugar de preguntarle que tal estuvo su día y bombardearlo de preguntas ¿cómo le fue en el colegio?, ¿que tal su lonchera?, ¿que hizo?, ¿con quien jugó? Le cuento lo que yo hice durante el día sin el. Al contarle mi día trato de ser lo más descriptiva posible.
Aprovecho mi relato para darle énfasis a los sentimientos y situaciones donde puede haber un aprendizaje, para así inculcarle algunos valores y lecciones de vida. Le cuento lo que me pasó y como me sentí, por ejemplo: me molesté cuando estaba haciendo la fila en el banco y una señora quiso ponerse delante mío, me tropecé bajando la escalera y sentí mucha vergüenza o me encontré con mi miss del colegio que no veía desde que era chiquita y me emocione mucho. Además intento compartir situaciones donde puede haber un aprendizaje, como por ejemplo que a una señora se le rompieron las bolsas del supermercado, se le cayeron todas sus compras y yo me detuve a ayudarla o que un señor que no conocía me empezó a hacer preguntas que yo no quería contestar y le dije que yo no hablaba con gente que no conozco.
Gracias a esta costumbre las últimas veces que he querido empezar a contar mi día Joaquin me interrumpe y me dice: “No mami yo te cuento primero”. No sé si es porque ya está harto de escucharme hablar o porque realmente ya adquirió la costumbre, sea como sea les puedo decir que esta técnica funciona. Me cuenta con detalles como fue su día que es algo que todas nos morimos de ganas de saber. Esta idea que me dio la esposa de mi padrino (gracias Maqui!) promueve la costumbre de conversar con nuestros hijos y de tener un espacio de intercambio de ideas y sentimientos. La comunicación entre padres e hijos es clave, tener la costumbre con nuestros hijos desde que son pequeños les dará más seguridad y confianza para siempre sentirse cómodos de acudir a nosotros.
Pueden aprovechar para contarles sobre lo que está pasando actualmente en nuestro país. Algunas ideas para conversar son ¿Qué son los huaycos?, ¿cómo ahorrar agua?, ¿como ayudar a los que lo han perdido todo?. Es sorprendente como desde chiquitos se dan cuenta de todo y aprenden a ser solidarios y agradecidos.
Crédito fotografía: Andrea Narvaez Fotografía
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Lo máximo los tips, me encanto, lo probare con mi hijita de casi 3 años y te cuento. Gracias!!!