En dos días cumplo 32 años, por alguna razón me están pesando más que cualquier otra edad. (Será porque realmente ya me siento más tía). Una amiga en plan broma me dijo: “nos vemos el miércoles para celebrar los 23!”. Ya quisiera pensé… a ese edad no pensaba en nadie más que en mi. Dormía un montón y riquísimo, salía a la hora que quería y cuando quería sin darle explicaciones a nadie, tenía mucho más energía y me veía bastante mejor que ahora (9 años no pasan en vano).

Luego de ponerme nostálgica recordando mis 23 pensé en todo lo que tengo ahora. Por más cansada que estoy y que a veces me demoro más de la cuenta en la ducha porque es el único momento que siento mío… No debo olvidarme de agradecer. La verdad que no duermo bien hace años pero recibo miles de «te quiero mami» al día sin pedirlos, no salgo a bailar al menos que alguien se case, pero los bailes que tengo en mi casa con mi familia en pijama son únicos e insuperables. Tengo piel muerta en la barriga, una cicatriz queloide y los pechos desinflados y caídos pero todo por una buena causa. (La mejor diría).

A veces el cansancio y la rutina hace que nos quejemos más de la cuenta. Por eso es importante frenar un poco, mirar nuestra vida desde fuera y no olvidarnos de agradecer. A puertas de cumplir 32 años, con la mitad de pelo que antes y con unas ojeras que no me abandonan (por más cremas que me ponga), no puedo dejar de agradecer por todo lo maravilloso que me rodea y me pasa.

Agradezco ser indispensable y necesitada por dos personitas, y gracias a ellos haber conocido mi mejor versión. Agradezco llegar a mi casa y que me reciban con tanto amor y felicidad. Agradezco poder dedicarme a mis hijos tiempo completo. Agradezco tener una familia sana. Agradezco haber nacido en el contexto que me tocó.  Agradezco poder dedicarme a lo que me gusta. Agradezco a mi esposo por ser mi compañero, mi cómplice y esa autoridad que muchas veces me falta. Agradezco ser feliz.

Es verdad… no cumplo 23, no puedo agarrar una mochila y escaparme de viaje sola o dormir hasta las 12 del medio día como solía hacer. Cumplo 32 y tengo dos hijos que consumen casi todo mi tiempo, mi vida ya no me pertenece solo a mi, y ya tengo arrugas… pero no me cambio por nadie! Dejo de lado el bajón de cumplir años y empiezo los 32 agradeciendo. ¡Salud por eso! #ProximamenteHappyBirthday2me #NoTeOlvidesDeAgradecer

]]>

Escrito por kiki

Deja un comentario